Dios te Bendiga,

La obediencia no siempre tiene sentido; no siempre parecerá ser lo “correcto”. Sabemos que la obediencia no es muy popular y la mayoría de las veces, no nos sentimos felices en el proceso de ser obedientes. ¿Por qué les hablo de esto hoy? Si no somos obedientes jamás experimentaremos lo sobrenatural. Permítanme explicarles: la desobediencia o el hacer lo que nosotros queremos (lo carnal), solo producirá resultados humanos (cuando hacemos lo humanamente posible solo veremos resultados “naturales”). Los humanos podemos lograr cosas naturales; con esfuerzo y persistencia podemos lograr muchas cosas pero las cosas imposibles, son para Dios. El versículo de hoy nos habla precisamente de lo imposible. En esta parte de la Biblia Josué acababa de venir derrotado de una batalla y tenía problemas con el pueblo. Sin importar sus circunstancias, Dios le dio una orden y el obedeció. La obediencia de Josué determino la diferencia entre la victoria y la derrota. ¿De qué obediencia hablamos? Visualizo al enemigo, levanto su arma hacia él y a pesar que tenía mil cosas en su mente y muchas emociones encontradas, Josué espero en el Señor. Ese día el alcanzo la victoria y pudo disfrutar el botín de su enemigo no porque el supiera pelear sino porque confió en su Dios y actuó de acuerdo a lo que Dios le había dicho. 

Levantando mi jabalina,

Pastor Joell Perez

Josué 8:18 “Entonces el Señor dijo a Josué: Extiende la jabalina que está en tu mano hacia Hai, porque la entregaré en tu mano. Y extendió Josué hacia la ciudad la jabalina que estaba en su mano.”

¡Dios te Bendiga!

Si eres padre de familia entenderás lo frustrante que es repetirles a los hijos una y otra vez sobre algún asunto y que ellos sigan haciendo totalmente lo contrario. Estoy seguro que muchas veces nos preguntamos si estarán escuchando. Este mismo concepto aplica a nuestra relación con Dios. El insiste, repite una y otra vez y nosotros no escuchamos. El versículo de hoy nos muestra que el ser reacio simplemente nos destruirá. Puede ser que no nos destruya físicamente pero definitivamente si lo hará en lo emocional, espiritual y hasta en lo económico. Creo que llegó el tiempo de escuchar.

Pastor Joell

Proverbios 29:1 “El que es reacio a las reprensiones será destruido de repente y sin remedio.”

Dios te Bendiga,

Todos hemos escuchado el siguiente dicho en algún momento de nuestras vidas, “las acciones hablan más que mil palabras.” Esto es totalmente cierto en toda relación, tanto en nuestras relaciones con otras personas como en nuestra relación con Dios. Podemos decir “te amo” hasta que se nos ponga azul la cara pero si nuestras acciones no coinciden con nuestras palabras, nuestras palabras no tendrán ningún sentido, ni ningún valor. Podemos hacer mil promesas a Dios o a otros pero si nuestras acciones no van de acuerdo con lo que prometimos, simplemente estamos perdiendo el tiempo e hiriendo a los demás. ¿Será que la gente puede confiar en nuestra palabra? ¿Estaremos cumpliendo nuestras promesas? Muchas veces nos prometemos cosas a nosotros mismos y tristemente tampoco cumplimos estas promesas; estas se quedan nada más que en palabras que suenan bonito pero nada de acción. En este día recordemos que el amor es una acción, el verdadero amor es mucho más que palabras dulces, es una acción… y este se demuestra con “hechos y de verdad”.

Pastora Laura Palacios

1 de Juan 3:18 “Queridos hijos, no amemos de palabra ni de labios para afuera, sino con hechos y de verdad.”

Bendiciones del cielo,

Nada de lo que hagamos para el Señor es en vano; el ve absolutamente todo y a su tiempo, ¡Dios nos recompensara con todas sus bendiciones! No te preocupes por ser reconocido o apreciado porque al final, lo hacemos para Dios y no para el hombre. Todo lo que hagamos para los suyos (los hijos de Dios) lo estamos haciendo automáticamente para él. No te desanimes y mantén tu gozo, el Señor siempre está observando y el, ¡recompensará todo lo que hagamos de corazón!

1 de Corintios 15:58 “Así que, amados hermanos míos, manténganse firmes y constantes, y siempre creciendo en la obra del Señor, seguros de que el trabajo de ustedes en el Señor no carece de sentido.”

Pastora Elizabeth Perez

¿Alguna vez has tenido una discusión con alguien sobre algún tema sencillo pero a medida que discutían el volumen iba escalando y el lenguaje corporal iba empeorando drásticamente? Las cosas fueron de una simple discusión a una pelea fuerte donde tal vez ¿llegaron a los puños? ¿Fuiste tú el que agredió o el agredido? No importa cual lado de la pelea hayas tenido lo que importa hoy en día es que hayamos reflexionado sobre nuestra actitud y reacción y ahora tengamos otra perspectiva para el futuro. ¿Por qué es esto importante? Uno de los requisitos más importantes como cristianos es crecer en nuestra sabiduría. Si solo pretendemos tenerla, el progreso a nuestras metas será muy lente y hasta doloroso. ¿Quieres ganar una pelea? No grites, más bien calma tu ira. No reacciones agresivamente, más bien reacciona pacíficamente, esto es señal de sabiduría y un gran paso en la dirección correcta hacia la prosperidad.

Tomando las cosas con calma,

Pastor Joell

Proverbios 29:11 “El necio da rienda suelta a su ira, pero el sabio sabe dominarla.”

¡Dios te Bendiga!

Si eres padre de familia entenderás lo frustrante que es repetirles a los hijos una y otra vez sobre algún asunto y que ellos sigan haciendo totalmente lo contrario. Estoy seguro que muchas veces nos preguntamos si estarán escuchando. Este mismo concepto aplica a nuestra relación con Dios. El insiste, repite una y otra vez y nosotros no escuchamos. El versículo de hoy nos muestra que el ser reacio simplemente nos destruirá. Puede ser que no nos destruya físicamente pero definitivamente si lo hará en lo emocional, espiritual y hasta en lo económico. Creo que llegó el tiempo de escuchar.

Pastor Joell

Proverbios 29:1 “El que es reacio a las reprensiones será destruido de repente y sin remedio.”

Dios te Bendiga,

¿Qué exactamente significa la palabra “actitud”? Puede ser que escuchemos a algunos decir, “esa persona tiene una actitud terrible” o en el lado opuesto, otros pueden decir, “me encanta la actitud de tal persona”. ¿A qué se están refiriendo con estos comentarios?  Primero miremos la definición que nos da el diccionario, la palabra “actitud” significa: “pensamiento o sentimiento establecido hacia algo o alguien, usualmente reflejado en el comportamiento o conducta”. Nuestra actitud no solo afecta nuestras propias emociones, decisiones y acciones sino que también puede afectar seriamente a todos aquellos que nos rodean. Como la misma definición lo implica, nuestra actitud es reflejada en nuestro comportamiento o conducta y esta es un reflejo claro de lo que llevamos por dentro. ¿Qué clase de actitud estamos reflejando? ¿Estaremos reflejando el carácter de Cristo en nuestra actitud o será que hemos “establecido nuestros propios juicios y pensamientos”? Selah… ¿Qué clase de actitud debemos tener? Es muy sencillo, el versículo de hoy nos indica exactamente qué debemos hacer, “no buscando cada uno sus propios intereses, sino más bien los intereses de los demás. Haya, pues, en vosotros esta actitud que hubo también en Cristo Jesús.” Filipenses 2:4-5 Jesús era humilde, obediente, compasivo, perdonador, amoroso, entregado, paciente, generoso, sabio, diligente y misericordioso…estas son solo algunas de las características de su actitud, esto es lo que nosotros también debemos reflejar en nuestras vidas.

Pastora Laura Palacios

Qué es lo correcto?

¡Dios te Bendiga!

Alguna vez te has preguntado, ¿qué es lo correcto en este caso? Creo que todos nos hemos hecho esta pregunta en algún momento. ¿Por qué es que hacer o aceptar lo “correcto” es tan difícil a veces? Creo que nuestro orgullo es el mayor culpable.  ¡El orgullo es DIABÓLICO! El orgullo nos puede destruir si se lo permitimos. Nosotros no somos diabólicos. Tenemos que buscar a Dios más y más para que él, nos ayude con nuestros pensamientos. Buscar a Dios de corazón es la respuesta para quitar cualquier duda sobre el bien y el mal (lo correcto o incorrecto). 

Proverbios 28:5 “Los malvados no entienden nada de la justicia; los que buscan al Señor lo entienden todo.”

Dios te Bendiga, 

El ser una persona fuerte no significa que empujas a los demás…todo lo contrario; esto significa que tú eres el que los levanta y los anima. El ser una persona fuerte no significa que tu voz es la más alta y tus palabras son las más fuertes…todo lo contrario; esto significa que sabes escuchar con gentileza y que tus palabras son dulces y sabias a medida que alientas a los demás. El ser una persona fuerte no significa que nunca te caerás…todo lo contrario; esto significa que cuando te caes, sabes reconocer tus errores y aprendes de ellos admitiendo que solo la fuerza de Dios, es la que te ayuda a levantarte. En este día, recordemos que todos estamos en esto juntos. Todos fuimos creados por el Padre para ser UNA sola familia que se apoya y se anima… “Por tanto, confórtense (aliéntense) los unos a los otros, y edifíquense el uno al otro, tal como lo están haciendo.”  1 de Tesalonicenses 5:11

Pastora Laura Palacios

Dios Te Bendiga,

¿Cuantas veces tengo que perdonar? Le preguntó uno de los discípulos a Jesús y él le respondió  “70 veces 7” y en realidad esto es mucho. Muchas veces en ciertas situaciones sentimos que es imposible lograr un perdón total, pero ¿qué sucede si a la persona que tienes que perdonar es a ti mismo? Quizás pensemos que perdonarnos a nosotros mismos por todo lo que hemos hecho mal sea fácil pero no siempre lo es. Cuando nuestros errores nos han causado un gran daño personal y por más que tratamos seguimos repitiendo la misma falla, es cuando más duele y más difícil es el aceptar el perdón de Dios y perdonarnos a nosotros mismos. En este día quiero recordarte que no existe mal, error o pecado alguno en todo este mundo, que la sangre de Jesús no pueda limpiar y perdonar. Pídele al Señor que te limpie con su sangre poderosa y aprende a perdonarte a ti mismo primero para que así, puedas perdonar a los demás más fácilmente y de corazón. “Pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros y la sangre de Jesucristo, su Hijo, nos limpia de TODO pecado.” 

1 Juan 1:7 Este versículo nos enseña específicamente que TODO PECADO es limpio no solo algunos. 

Pastor Roberto Palacios